Para conseguir vivienda, salario, trabajo, salud y educación…

Hay que expropiar al imperialismo y a la patronal esclavista que son los que saquean al país, hambrean al pueblo pobre y se roban el salario obrero y el derecho a la vivienda digna

La burguesía bolivariana de los kirchner que ya le han pagado 47 mil millones de dólares al FMI, ahora van a entregarle a los parásitos del Club de Paris cerca de 8 mil millones de dólares por la fraudulenta deuda externa. Quieren ocultar a los ojos de los trabajadores y los explotados, que en los últimos 2 años los capitalistas han fugado 47 mil millones de dólares al exterior en concepto de royalties, utilidades y patentes.
Mientras los obreros no tenemos tierra ni vivienda, Cristina Kirchner, en común acuerocon todos sus opositores, le han entregado a la minera imperialista BHP Billinton –accionista de la Falkland Oil & Gas, la petrolera que busca crudo en las Islas Malvinas- 40.000 hectáreas en Salta para explotar a cielo abierto las minas de cobre y oro.
El ya difunto Néstor Kirchner, al que toda la burguesía honra porque le ha garantizado enormes ganancias, firmó un convenio con la petrolera imperialista Pan American Energy por el cual le concedió hasta el año 2047 la explotación del cerro Dragón, el mayor yacimiento petrolífero del país.  

Esta burguesía rastrera que se dice "nacional y popular", tiene acumulados en las reservas del Banco Central 50 mil millones de dólares extraídos de la plusvalía arrancada al movimiento obrero, los cuales el gobierno destina una parte en millonarios subsidios para los monopolios imperialistas, a las privatizadas y a los patrones esclavistas.
Los patrones sojeros con la exportación de soja y trigo, acumulan ganancias por decenas de millones de dólares, mientras las familias obreras no pueden pagar ni un plato de comida diaria y el precio de los alimentos y de la carne no cesan de subir. Esto también pasa en momentos que los trabajadores y la mayoría de los explotados, no tenemos casas, ni terrenos donde construirla, ni podemos pagar los alquileres por los míseros salarios que cobramos. ¡La clase obrera es la única clase que produce todas las riquezas mientras las transnacionales, los monopolios saquean y se roban todo!
Con todo ese dinero y riquezas que hay en danza y que se guardan en sus bolsillos los patrones, se podrían construir más de 10 millones de viviendas en Argentina, se podría conseguir alimentos de primera calidad para más de 400 millones de personas, se podrían construir cientos de escuelas y hospitales públicos. Plata sobra, pero se la roban el imperialismo y la gran patronal. Por eso la clase obrera tiene que expropiar a los expropiadores. Debemos expropiarles los bancos, los countries, las fábricas, los campos y todas las propiedades burguesas.

La clase obrera tiene que retomar el camino revolucionario trazado en el 2001 bajo el grito de guerra ¡”Que se vayan todos, que no quede ni uno solo”!, que luego continuaran sus hermanos obreros y campesinos bolivianos, quienes durante los levantamientos revolucionarios del 2003-2005, pusieron como moción para el conjunto de las masas del continente: ¡Fuera las transnacionales! ¡Fuera gringos! ¡Los hidrocarburos son nuestros! ¡Ni 30%, ni 50%, nacionalización! ¡Fusil, metralla, Bolivia no se calla!

Los patrones nos han declarado la guerra, los trabajadores debemos responder a la altura de su ataque. ¡Son ellos o nosotros! No hay otro camino posible. No hay futuro para los explotados si la clase obrera no toma el poder. Solo con el triunfo de la revolución obrera y socialista, podremos poner todos los recursos de la nación al servicio de la alimentación, el aumento de salario, la salud y la educación para los trabajadores y el pueblo pobre.